QUICHÉ DE MORCILLA CON PERA

Siempre me ha llamado mucho la atención el mundo de los “Quiché”, los he rellenado de todo, con pisto, con bacón y champiñones, con espinacas y queso de cabra… hay infinitas posibilidades, el sistema es siempre el mismo, una masa quebrada, una mezcla de huevos y nata, y los ingredientes que nos pasen por la imaginación.

En esta ocasión me decidí por este de morcillas, que tenía guardadas en el congelador desde que mi padre las trajo del pueblo, y hoy me decidí a darles una utilidad. Os invito a que inventéis vuestra propia quiché, os aseguro que esta fue todo un éxito.

INGREDIENTES:

Para la masa quebrada: 250g de harina, 100 g. de Mantequilla,  50ml de Agua y sal

Para el relleno: 1 Cebolla, 1 Puerro, 100g de Beicon, 50g de Pasas, 2 Morcillas, 2 Peras (porque no tenía más, pero 3 estarían bien), 2 huevos, 250g de nata (podéis utilizar un brick pequeño y completar con leche), Queso rallado.

PREPARACIÓN:

Prepararemos la masa quebrada con antelación, porque necesita un tiempo de refrigeración. Simplemente mezclamos la mantequilla pomada con la harina, pellizcando con la punta de los dedos y formando una textura arenosa, no hay que amasar en exceso, sino queda una masa demasiado elástica y no nos interesa. Cuando tengamos una arena grumosa incorporamos el agua y la sal y amasamos ligeramente, lo justo para integrarlo todo. Envolvemos en papel film y reservamos en la nevera. 

Cuando haya tomado cuerpo la estiramos con un rodillo y la disponemos sobre un molde de tartaletas. Cubrimos con papel de aluminio, ponemos algo de peso (unos garbanzos), y lo horneamos 20 minutos a 200ºC, cuando haya transcurrido este tiempo, lo sacamos, quitamos el papel de aluminio y las cargas y horneamos otros 20 minutos a 200ºC.

Para el relleno, rehogamos la cebolla con el puerro cortado finamente. Cuando esté listo añadimos el bacón y las pasas, salteamos ligeramente y por último incorporamos la morcilla.

Por otro lado batimos los huevos con la nata y ponemos a punto de sal y pimienta.

Para montar la quiché, esparcimos la mezcla de morcilla sobre la masa horneada, y cubrimos con la mezcla de huevo y nata, damos unos golpes para que se mezcle bien. Cubrimos con queso rallado y por último la pera cortada en finas láminas.

Horneamos durante 30 minutos a 200ºC, hasta que cuaje la mezcla y las peras queden doraditas.

Es bueno dejarla reposar unos 15 minutos antes de servir.

¡De la France con sabor!