Hola de nuevo. Perdón si últimamente sólo subo recetas
dulces (cuando las subo, jeje) pero es que últimamente no me estoy encargando
de la comida y el poco tiempo que tengo me he propuesto hacer algún postre
diferente. Pero prometo que la próxima entrada será un plato salado que ya
tengo entre manos y que estoy deseando compartir con todos vosotros.
Por ahora, disfrutad de esta tarta de moka, que tenía muchas
ganas de hacer, y para la que utilicé un bizcocho de claras, que para mi gusto
es el bizcocho más rico que he hecho nunca. Ya lo compartí con vosotros en otra
ocasión, y sin duda tiene un sabor suave, muy agradable, es jugoso y a mí me
encanta. Tiene una textura que hace innecesario mojar el bizcocho, aún así lo
empape un poquillo. Para la crema de moka, utilicé una crema de mantequilla
como las que se usan para decorara cupcakes, que también era una cuenta
pendiente. Para mi gusto un poco dulce de más, pero la textura perfecta.
INGREDIENTES:
Para el Bizcocho de Claras: 9 Claras, 1 Pizca de Sal, 230g de Harina, 1 Sobre de Levadura, 100g de Mantequilla con textura Pomada, 180g de Azúcar, El Zumo de una Naranja y de un Limón, La Ralladura de Media Naranja y de Medio Limón.
Para la Crema de Moka: 250g de Mantequilla, 500g de Azúcar
Glass, Café concentrado.
Para el Almíbar: 200g de Azúcar, 200g de Agua, Un Chorrito
de Ron, Un chorro de Café. (Rama de Canelo o Corteza de Limón, opcional)
PREPARACIÓN:
En este caso pondremos especial hincapié en la crema. Por
los ingredientes es muy sencilla, solamente tenemos que batir todos los
ingredientes con una batidora de varillas y dejar que blanquee, agregaremos
concentrado de café hasta obtener el sabor e intensidad que queramos.
Para obtener un mejor resultado es conveniente usar una
azúcar glass super fino (sugar icing) o triturarlo un poco más con termomix o
un molinillo de café.
En cuanto al concentrado de café. Cuando me disponía a hacer
la crema, pensé que añadirle café líquido no podía dar buenos resultados. Así
que mezclé el café con parte del azúcar de la receta (como tres partes de
azúcar por el peso de café), y lo reduje, hasta obtener una especie de
mermelada de café, una vez enfriado cuando adquiere la textura definitiva. Ese
concentrado es el que agregué a la crema, de manera que no perdió la textura de
mantequilla y estaba perfecta para untar. Podemos añadir algún aroma como de
ron o vainilla
Para el almíbar ponemos todos los ingredientes en un cazo y
dejamos hervir unos minutos hasta que el azúcar se disuelva y todos los
ingredientes se integren.
Para montarla tarta, cortamos el bizcocho por la mitad, calamos
el bizcocho con el almíbar, cubrimos con una parte de la crema, colocamos la
otra mitad encima, presionamos ligeramente y cubrimos toda la tarta con el
resto de la crema. Reservamos una pequeña cantidad para hacer algunas
decoraciones.
Mmm tiene una pinta estupenda y el sabor seguro que me encantaría. Feliz semana.
ResponderEliminarPrecioso pastel, se come con la vista.Un saludo de Las Chachas.
ResponderEliminarMuchísimas gracias a las dos, estaba el blog un poco aburrido últimamente.
ResponderEliminarSaludos
Q pinta tiene la tarta y q rica tiene que estar la crema.
ResponderEliminarMe la apunto
Me alegro de que te guste. Un saludo
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