Desde hace tiempo estoy dándole vueltas a esta receta, me
encantan las galletas con pepitas de chocolate, sobretodo mojadas en leche, me
conozco todas las marcas, y por eso quería probar varias recetas de las miles
que hay y quedarme con la mejor. Pues esta es la primera de las recetas para
encontrar las mejores galletas con pepitas del mundo mundial.
De las que os presento hoy puedo decir que de sabor están
muy ricas, muy parecidas a las "Chips Ahoy", mantuvieron durante el tiempo que
duraron su crujiente y son fáciles de hacer. Pero para mi gusto le falta un
poco de friabilidad, de esa ligereza y crujiente propio de las galletas, deberé
seguir dándole vueltas, aun así muy recomendables.
INGREDIENTES (para unas 24 galletas pequeñas):
100g de Harina, 100g de Pepitas de Chocolate, 50g de Azúcar
Moreno, 50g de Azúcar blanca, 50g de Mantequilla, 1 Huevo Pequeño, Media
Cucharadita de Bicarbonato, Esencia de Vainilla, 40g de Almendra Granillo
Tostado (O nueces, o Avellanas), Una Pizca de Sal.
PREPARACIÓN:
En primer lugar derretimos la mantequilla ligeramente, que
no se deshaga del todo. Y la mezclamos con el huevo, con ayuda de una varilla,
no importa que no se mezcle del todo bien. Añadimos también un chorrito de
esencia de vainilla.
Entonces incorporamos las dos partes de azúcar y seguimos
mezclando, a continuación añadimos la harina con el bicarbonato y la pizca de
sal mezclados y seguimos amasando con ayuda de una espátula. Por último
incorporamos las pepitas de chocolate y el fruto seco picado y tostado.
Para tostarlo simplemente saltee las almendras en una sartén
sin dejar de mover, y dejé que se enfriaran antes de incorporarlas a la mezcla.
La masa de galletas debe tener una textura de pomada o pasta
de dientes, fácilmente manejable, pero algo pegajosa. Si nos queda muy sólida
podemos agregar un poquito de leche.
Por último formamos unas bolitas y las vamos colocando sobre
una bandeja de horno, bien esparcidas porque tienden a abrirse bastante. Para
que nos queden más uniformes debemos aplastar un poco las bolitas para
ayudarles a esparcirse. Introducimos las galletas en el horno, que habremos
precalentado a 180ºC, durante unos 8-10minutos, hasta que veamos que comienzan
a tomar un bonito color dorado, pero sin pasarnos, pues las galletas fuera del
horno endurecen y acaban de tomar su textura definitiva. Una vez las saquemos
del horno las dejamos enfriar unos minutos antes de intentar retirarlas del
papel o la bandeja de horno.
¡Listo para mojar en un frío vaso de leche!
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