Hacía tiempo que quería hacer esta musaka para compartirla
con todos vosotros. La musaka es un plato originario de los Balcanes y Medio
Oriente, la versión más conocida es la griega, y originalmente se elabora con
carne de cordero. Esta especie de lasaña hecha con berenjena es un manjar que
gusta a todo el mundo y muy fácil de hacer, además como podemos prepararla con
antelación la podemos dejar hecha el día de antes para esos días en que estamos
muy liados y queremos hacer algo rico de comida. La receta original suele
rematarse con bechamel por encima, en esta ocasión opté por omitirla, aunque me
parece que haciendo esto tampoco estoy siendo muy infiel al original, por lo
que puedo leer por ahí. Hay que tener precaución con el aceite en esta receta,
puede quedar muy aceitosa, así que hay que escurrir muy bien la berenjena,
aplastándola bien con papel absorbente aunque se desmorone un poco.
INGREDIENTES:
500g de Carne Picada, 2 Dientes de Ajo, Media Cebolla, 1
Zanahoria, 1 Pimiento pequeño, 1 Bote de Tomate Frito, 5 Berenjenas Medianas,
Queso Rallado.
Veréis que rápido y fácil. En primer lugar preparamos una
salsa boloñesa como más os guste, en mi caso rehogué los ajos, la cebolla, una
zanahoria y un pimiento pequeño, todo muy bien picadito, en un poco de aceite,
cuando está bien pochado añado la carne picada, la pongo a punto de sal,
pimienta y orégano y añado entonces el tomate frito, Reservamos.
Por otro lado, mientras se cocina la carne, vamos friendo la
berenjena. Para ello, la pelamos (opcional), cortamos en rodajas muy finas y
freímos en abundante aceite muy caliente, para esto es conveniente contar con
una buena freidora, así lo haremos en un periquete. (Otra opción es colocar
todas las rodajas en dos bandejas, con un chorrito de aceite y sal, y hornearlas
hasta que estén blanditas y empiecen a dorarse, de esta forma disminuiremos
bastante las calorías y quedará igual de bien)
Os hago un apunte. Para evitar el sabor amargo de la
berenjena, se aconseja dejarla reposar con un poco de sal, y después lavarla
bien, se supone que de esta manera comienza a soltar el líquido que da ese amargor
a la berenjena, si disponemos de tiempo está bien hacerlo, aunque para mí la
berenjena está bien sin necesidad de recurrir a este paso.
Una vez bien frita toda la berenjena, y bien escurrida,
vamos colocando capas alternativas de berenjena y carne, comenzando y
terminando con berenjena. Yo puse 3 capas de berenjena y 2 de carne.
Finalmente cubrimos con queso rallado y horneamos a 180ºC
durante 30 minutos.
Es conveniente dejarla reposar unos minutos antes de cortar.
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